El choque cultural

Para estudiar el término «choque cultural», es imprescindible partir de los conceptos de transferencia pragmática e interferencia pragmática.

Los hablantes interpretan su cultura partiendo de sus propias experiencias. Esto les conduce a buscar comparaciones que expliquen los nuevos fenómenos de la cultura meta a partir de los aspectos conocidos y aceptados en la cultura de origen.

Por si fuera poco, el mirar otra cultura bajo el prisma de la cultura propia suele estar fundamentado en la creencia de que nuestra cultura es la única que obedece a criterios lógicos y racionales. Por lo tanto, sería muy beneficioso intentar ver las culturas ajenas bajo el prisma de los nativos de esa cultura.

A lo largo del proceso, surgen, de manera inevitable, los choques culturales. El contacto con una cultura que no es la nuestra suelen llevar aparejados ciertos trastornos emocionales, personales o colectivos. Estos choques suelen estar basados en tabúes y creencias originadas por criterios etnocentristas y una falta de conocimiento y aceptación de maneras de pensar y de vivir diferentes a las nuestras.

CONSECUENCIAS DEL CHOQUE INTERCULTURAL

En la comunicación entre culturas, hay dos procesos psicológicos que repercuten negativamente en la comunicación y que es necesario aprender a gestionar de manera adecuada: la incertidumbre y la ansiedad. Mantener un nivel de incertidumbre es positivo cuando motiva al estudiante a conocer la cultura meta sin llegar a provocar ansiedad en sus interacciones.

Cuando la incertidumbre provoca ansiedad, se produce una comunicación poco eficaz porque solemos recurrir a prototipos y estereotipos. Un conocimiento adecuado de la cultura meta deriva, por lo tanto, en menor ansiedad y mayor motivación por parte del aprendiz.

Una consecuencia positiva de los choques interculturales es que puede favorecer una buena disposición hacia otras culturas. Esto pasa, por supuesto, por la necesidad de un enfoque adecuado por parte del profesorado para fomentar la competencia sociocultural e intercultural.

TIPOS DE CHOQUES CULTURALES

Obviamente, no todos los choques culturales son del mismo signo, sino que podemos distinguir diferentes grados: hay choques culturales que proceden de simples malentendidos y que se evitan con el contacto y conocimiento de la cultura en cuestión, mientras que hay otros choques culturales mucho más profundos, procedentes de posiciones vitales y culturales radicalmente enfrentadas.

También existen choques culturales menos graves, a los que podemos denominar «tropiezos culturales», que se producen cuando falla la comunicación entre hablantes de diferente procedencia cultural o cuando en un texto o conversación existen determinados elementos culturales específicos que dificultan la comprensión o interpretación total de los elementos de carácter específico de una cultural

Podemos distinguir, por último el concepto de etiqueta. La etiqueta hace referencia a los códigos de comportamiento que configuran unas normas sociales que sirven para actuar dentro de una determinada sociedad, clase social o grupo. La etiqueta nos sirve para aprender a comportarnos dentro de un determinado contexto cultural.

Para saber más…

El término ‘cultura’ Y CARACTERÍSTICAS DEL CONCEPTO DE CULTURA

EL TÉRMINO CULTURA

Dada la dificultad para definir de forma adecuada el término cultura, se hace necesario realizar un recorrido por las principales definiciones del término desde diferentes perspectivas.

La cultura tiene unos efectos y consecuencias indudables en la enseñanza de una LE/L2.

Existen tantas definiciones de cultura como disciplinas que estudian a los seres humanos. Aunque podamos manejar tantas definiciones de cultura como disciplinas que estudian la especie humana, la mayoría coinciden en considerarla como una serie de habilidades y conocimientos de carácter colectivo, compartidos y organizados con unas reglas comunes.

Nos podemos acercar al término cultura desde tres perspectivas:

Desde el punto de vista etimológico:

La cultura, en su origen, tiene que ver con la labranza de la tierra y luego, por extensión, con el cultivo de la mente y del espíritu.

Desde el punto de vista normativo:

El DLE define el término cultura de la manera que sigue:

  1. Cultivo.
  2. Conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio crítico.
  3. Conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etc.

Y define «cultura popular» como: «Conjunto de las manifestaciones en que se expresa la vida tradicional de un pueblo».

En consecuencia, según esta definición, podemos deducir que existen, al menos, tres tipos de culturas: una cultura de carácter erudito e individual, una cultura con una vertiente más social y una tercera cultura que aúna el carácter social con el carácter tradicional.

Desde el punto de vista de disciplinas como la antropología, la sociología o la traducción:

Desde un ángulo antropológico, la cultura comprende una serie de símbolos y signos que se aprenden y transmiten socialmente. Desde un ángulo sociológico, la cultura es una construcción del ser humano, un mapa mental con significados y una guía de comportamiento por la que es posible entender nuestro mundo. Al nacer, nuestra comunidad nos proporciona los mecanismos para interpretar la realidad. en este sentido, la cultura define nuestras relaciones con los demás miembros de la sociedad.

Definiciones de cultura de sociológos y antropólogos:

Taylor, en 1871 [«La ciencia de la cultura»]: «aquel todo complejo que incluye el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres, y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre».

Goodenough, en 1957: «A society’s culture consists of whatever it is one has to know or believe in orden to operate in a manner acceptable to its members […] culture is not a material phenomenon; it does not consist of things, people, behavior, or emotions. It is rather an organization of these things. It is the forms of things that people have in mind, their models for perceiving, relating, and otherwise interpreting them».

La cultura tiene que ver, por lo tanto, con un sistema de ideas, creencias y formas de desarrollo que se crean y transmiten dentro de una sociedad. Conocer los elementos que forman parte de un sistema cultural facilita de manera evidente la comunicación entre dos interlocutores.

Pilares básicos del concepto de cultura:

El concepto de cultura se fundamenta en tres pilares básicos:

  1. Productos: literatura, folclore, música, etc.
  2. Valores: creencias, instituciones, organización social, etc.
  3. Comportamientos: costumbres, vestimenta, comida, etc.

CARACTERÍSTICAS DEL CONCEPTO DE CULTURA

Rasgos comunes que definen el concepto de cultura:

  • Es arbitraria. Aunque existen elementos universales en todas las culturas, cada cultura tiene su propio modelo de comportamiento cultural.
  • La cultura es un sistema compartido por un grupo de personas.
  • Se compone de categorías que ayudan a sus miembros a clasificar la realidad de una manera determinada.
  • Es un comportamiento adquirido por los miembros de una cultura y por el cual se rigen.
  • Los comportamientos adquiridos tienen una fijación y persistencia especiales que moldean nuestra vida y que están anclados ya en nuestros comportamientos y nuestras costumbres.
  • La cultura es una realidad viva y cambia continuamente.
  • La cultura es opaca. La parte de la cultura que podemos percibir es mucho menor que la parte que no percibimos. La mayor parte de la cultura se ha asimilado de manera implícita y, por lo tanto, a una persona ajena a esta cultura le resulta difícil acceder a algunos elementos claves para comprenderla.

Para saber más…

  • Jiménez-Ramírez, J. (2018). La enseñanza de cultura. Madrid: Arco Libros.
  • Jiménez-Ramírez, J. (2019). Cultura e interculturalidad (Culture and intercultural commnucation). En J. Muñoz-Basols, E. Gironzetti, & M. Lacorte (Eds.), The Routledge Handbook of Spanish Language Teaching (pp. 243–257). Abingdon, Oxon: Routledge.
  • Martínez-Atienza de Dios, M., & Zamorano Aguilar, A. (Eds.). (2018). Teoría y metodología para la enseñanza de ELE. 3: Programación y diseño de unidades didácticas. Madrid: enClave-ELE.