La dicha
La felicidad no entiende de perseverancia ni de voluntades. La dicha es un estado pasajero. Se levanta cuando empieza el día y, minuto a minuto, los hechos se disocian de nuestras ilusiones. Se tambalea a medida que reflexionamos, que pensamos fríamente Cae al atardecer, como el sol. Y nos dormimos con el miedo y con la ilusión […]