Antes de que te des cuenta, puedes acabar con demasiado frío en el corazón. Por eso, digan lo que te digan, continúa. No importa que crean que estás loco: nadie salvo tú sabe la verdad. Es difícil escuchar las grandes palabras cuando, a tu alrededor, todos hablan tan alto, pero la meta es evitar la caída y, para ello, la mejor medicina es la fiebre que acompaña a tu abrazo. Todo se escurre entre nuestros dedos, menos la lluvia de cicatrices sin dolor.
(Canción prosificada, traducida y modificada a voluntad de “Bleeding Love” de Leona Lewis, con imagen de Nick Kenrick)