Casi sin darme cuenta, sé que te vas. Cuando estás cerca, ya no me miras como antes. ¿Qué podías esperar de un corazón colmado de aburrimiento? ¿Qué podías pensar de alguien que miente a su tristeza con palabras bañadas en música de discoteca? Pienso ahora en un tiempo atrás, cuando siempre querías quedar, cuando todas mis cosas te solían gustar. Tú no lo notas ni lo sabes pero, sin ti, me da miedo despertar.
Pensaba invitarte a flotar, a volar conmigo, y resulta de que te vas. Yo, que daría mi vida entera por poderte besar… ahora me he convertido en alguien demasiado estático, demasiado melodramático. Me gustaría ser quien invada con palabras tus amaneceres, quien cierre con vocablos tus ojos cuando están cansados. Porque tú no lo notas ni lo sabes pero, sin ti, me da miedo despertar.
(Canción prosificada y modificada a voluntad –cambiando incluso su significado inicial– de la letra de «Chicos malos» de La Casa Azul con imagen de Fred Bouaine)