Hoy, 11 de junio de 2015, cumplen años dos grandes actores y grandes doctores en la ficción:
Gene Wilder, de filmografía irregular pero que, solamente por haber interpretado al Dr. Frankenstein (él preferiría que pronunciásemos «Fronk-en-steen») y haber sido el guionista de esa joya que es El jovencito Frankenstein, se merece que adornemos con flores cada uno de sus 79 años.
Hugh Laurie, que será para siempre y eternamente el Dr. House en House M. D, que nos ha transmitido con esa papel toda la mala leche encajada entre sorna, descaro y frustración, y que cumple 55 años.
Pero, repasando datos y anécdotas, me encontrado con un cineasta que merece la pena rescatar: James Algar, que nació un 11 de junio de un ya lejano 1912 y al que yo no tenía el gusto de conocer por el nombre. Solo diré que es, nada más y nada menos, el director del «El aprendiz de brujo», esa obra maestra del cine que es una de las partes de, a mi juicio, una de las películas más deslumbrantes, meritorias y poco conocidas de Disney: Fantasía, un filme en el que la animación se pone al servicio de la música clásica y la música el servicio de la animación.
Algar, además, es uno de los responsables de ese gran descubrimiento que fue tan duro (y necesario) en nuestra infancia: James Algar, y no otro, es el director responsable de la muerte de Bambi.
Aquí os dejo «El aprendiz de brujo»:
Buenos días, Raúl Urbina:
Felicidades, pues, a los que cumplen años.
Qué risa, con ‘El jovencito Frankenstein’. Estupendo Gene Wilder como el zorro en ‘El principito’.
Vaya!, ¿así que de lo de Bambi fue James Algar … ?
: )
Te dejo el enlace de la entrada que dediqué a la películas de Walt Disney, cuando las proyectaron en los cines de Burgos.
Saludos.