Diario de un turista 2013 #1 Elogio del turista

9711613880_f418ecfce7_z

Todo comienza con un viaje en coche, en autobús, en tren, en avión, pero concluye siempre en un metro o, sobre todo, deambulando por las calles de una ciudad.

Este año, el turista ha sentido que tenía que congraciarse de nuevo con ese concepto que defiende, tan distinto del viajero. El turista es todo aquel que no quiere diferenciarse del resto, que llega a una ciudad alta y mira hacia arriba, que ve un monumento significativo y quiere entrar a verlo, que mira a una ciudad vieja y propaga su mirada hacia todos los lados. El turista no se avergüenza de contemplar descaradamente a las personas que viajan en el metro, no intenta pasarse por una de aquellas personas que deslizan sus vidas cotidianamente cabizbajos. No esconde el plano con el que guiará sus pasos y abre las hojas de su guía turística orgulloso de lo que le queda por visitar, por contemplar. Y viaja siempre con una mochilita que protege fieramente con su mano izquierda.

(La imagen pertenece a uno de mis recientes viajes a Londres.)

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.