por la mañana he recorrido las calles bajo un frío mezclado con ventisca sin guantes y sin esperanzas por la mañana he mirado con mirada turbia a un individuo que me avasallada con el carro en el supermercado por la mañana he intentado mantener la cabeza fría y alejada de las preocupaciones cotidianas pero he fracasado al tercer intento a mediodía he pelado limpiado y cortado unos puerros para añadirlos a unas zanahorias y patatas en la olla a mediodía he abierto una botella de tinto de Ribera aunque me guste más el Rioja y he disfrutado a tragos la copa hasta que la inercia me ha devuelto a la rutina a mediodía he comido un filete de más por vicio más que por necesidad después de comer me he recostado en el sofá con la esperanza de echar una breve cabezada pero las noticias de las que no he sido totalmente consciente me lo han impedido por la tarde he visto una película a medias y un capítulo de una serie de televisión que me ha enseñado algún ángulo vital que desconocía por la tarde me he sentado ante el ordenador para trabajar y he conseguido solo aglutinar un par de ideas por la tarde he puesto música con la intención de refugiarme en los sonidos hasta el infinito pero la infinitud me ha durado doce canciones por la tarde me he olvidado de lavarme los dientes me he acercado al cuarto de baño me he empezado a cepillar y me he dado cuenta de que empezada a hacerlo de forma demasiado intensa y vigorosa me he mirado fijamente al espejo y he visto algo que no me ha gustado por último he escupido toda la pasta de dientes sobre el espejo con rabia con furia y con un poco de agua mezclada con babas por qué no decirlo me he secado con la toalla he apagado la luz y he salido de allí sin pensar en las consecuencias
(Entrada perteneciente a mi serie de Blogólogos interiores. Imagen de Antonio Martínez.)
interesante mostrarnos así el texto, sin puntos, sin comas, sin mayúsculas… sin consecuencias… ¿o no?
biquiños,.