Todavía no sé si quedaron atrás los días negros, pero tenemos la certeza de la llegada inminente de los días más grises. Y tengo miedo de que me dejes solo, de que me dejes sin arropar y sienta frío. Quedaron atrás los días verdes atrás, quizá los azules están preparados para llegar. Y tengo miedo de que, sin avisar, una marea me inunde. Tengo miedo de que los pájaros mueran sin ti, de que las piedras lloren sangre de tanto frío. Tengo miedo de que la gente sea cobarde y, sobre todo, tengo miedo de morirme sin ti. Los días rojos murieron, quizá lleguen a nacer días blancos. Y tengo miedo de que esta entrada no te guste y sientas frío. Los días marrones se esfumaron y los días violetas, quizá, nos visiten. Y tengo tanto miedo de que se olviden la utopía en el portal, tanto miedo de sentir frío… Tengo miedo de que los pájaros mueran sin ti, de que las piedras lloren sangre de tanto frío. Tengo Tengo miedo de que esta entrada no te guste. Y tengo miedo de que la gente sea cobarde y, sobre todo, tengo miedo de morirme sin ti.
(Canción prosificada y adaptada de «Días de Colores», de Celtas Cortos. La imagen es de Daniel Bunster.)
pero jamás permito que él lo descubra… tú tampoco debes permitir que se sepan tus incertezas.
es tan emotivo que siento ganas de llorar… quizá porque traslado tus emociones a mi corazón y…
tengo miedo de perderlo, que un día me despierte y el gris cubra mi ventana, tengo miedo de perderlo y que las lágrimas azules, hace años olvidadas, aneguen mis ojos como ríos de lava…
biquiños,