puede que fuera a escribir una entrada sobre el estilo una entrada sobre la forma de encajar las palabras los sintagmas y las frases para que todo resultara elegante pero no empalagoso una entrada con la forma como fondo una entrada reflexiva pero directa honda pero no extensa puede que hubiese puesto ejemplos de la vida cotidiana que es la maestra de nuestros actos pero también la discípula de nuestros olvidos puede que hubiese soltado alguna frase gruesa alguna ironía algún chascarrillo con gracia mediana pero hoy no es día para formas como fondos sino para fondos como formas como maneras de encauzar un fin de semana largo y encajarlo entre las cuatro paredes que suponen nuestro universo más cercano o entre las olas de un mar que no acariciará mis pierdas como paraíso más recóndito puede que me apetezca insistir sobre los recuerdos y sobre los olvidos sobre los pensamientos que flotan entre los vaivenes de nuestro cerebro sobre los trazos y los calcos de los paseos por los cuerpos y puede que las semanas lleguen a convertirse en porciones inferiores a los siete días y puede también que los meses se reduzcan o se extiendan más con voluntades que con las matemáticas perfectas de un calendario puede que hoy sea un día que precede a la amenaza segura de lluvia que antecede a lo que no será desde el ángulo obtuso de mi experiencia puede que hoy sea un día para dejar sacar las ideas dejando la correa larga para que correteen un poco y se cansen para que reciban el aire de las tardes tristes puede que hoy sea una tarde sin minutos mañana sea un día sin horas y pasado un fin de semana pero también puede que sea una manera de contemplar el tiempo desde una perspectiva vertical demasiado cicatera tiempos vendrán para sustituir a los de hoy y a los de mañana para reemplazar los segundos y recargarlos con el peso de la dulzura porque puede que en el fondo la dulzura sea una forma de decir fondos y una forma de esperar que lleguen los puntos y las íes
(Imagen de Shirin K. A. Winiger.)
Qué foto más inquietante… Besotes, M.