Fotografías. Vestigios e invenciones de la memoria. El instante más real y el momento que no ha existido. Una manera de ser, una manera de mirar. Una forma de encontrarse y enfrentarse al mundo. Sueño y verdad, a partes iguales. Las fotografías son a los viajes lo que nuestros recuerdos a la infancia. Las fotos alimentan la verdad de lo vivido y engrosan la ficción de lo que nos hemos inventado.
Los álbumes de fotos de nuestros viajes forman parte de nuestra forma de ser y son el martirio de nuestros conocidos. Todo el interés de lo retratado es parcial, incompleto, rellenado necesariamente con el relato, el contexto. No obstante, las fotografías deberían explicarse por sí mismas, con lo retratado y nosotros por dentro; pero no es bueno salirnos de la foto para invadir lo retratado. La mujer que ilustra esta entrada sólo existe en su imagen, impulsada por la gracia del momento. Todo lo demás –nuestros recuerdos, nuestras vivencias– sólo existen, ya, en el fondo de nuestra imaginación.
¡qué bueno está el fotógrafo! impresionante
Si no fueran por las fotografías, nuestra memoria se diluiría en el cosmos… Las fotos te traen recuerdos y revives de nuevo ese instante maravilloso. Muchos besotes, M.