Después de la entrada de ayer, sólo me queda -por ahora- descender a algunos pormenores. Por ejemplo, el hecho de que, como apuntaba Isabel Huete en uno de los comentarios, en la enseñanza hay un poco de todo. De hecho, no toda la tradición es mala ni toda la innovación buena. Seguro que algunos elementos de la enseñanza tradicional son buenos y algunas de las novedades de la novedad son vacías y nefastas. En cualquier caso, yo sigo alabando la labor de algunos compañeros que entregan generosamente su tiempo para agilizar la enseñanza adaptándola a los nuevos tiempos, compañeros que dedican sus esfuerzos a cambiar para bien el rumbo metodológico de la educación. Pondré dos ejemplos burgaleses que me vienen ahora mismo a la cabeza: Luis Oña, profesor del IES Félix Rodríguez de la Fuente de Burgos, que dedica sendos blogs a la enseñanza de la Geografía y de la Historia es un caso de entrega variada y pormenorizada. Y Luis Barriocanal, psicólogo y orientador, que lleva muchísimos años en el mundo de las aplicaciones informáticas enfocadas al mundo de la enseñanza (es un experto en Joomla), que imparte cursos para difundir sus enseñanzas y que colabora activamente en el diseño de muchos sitios web educativos. Me he querido detener hoy en el ámbito de la Enseñanza Secundaria. A veces tan tan despreciada, a veces tan olvidada. Y, para acabar, por si alguien no sabe lo que es afanarse en el mundo de la educación, recuerdo las siempre ilustrativas palabras del Diccionario académico: «Entregarse al trabajo con solicitud congojosa.- Hacer diligencias con vehemente anhelo para conseguir algo.- Trabajar corporalmente, como los jornaleros«. Eso es afanarse: nunca un verbo intransitivo tuvo un objeto más directo. Eso es afanarse. El resto es… otra cosa.
Me reitero en lo dicho.
Apoyo lo que indica Kokycid
Hace falta mucho maestro, profesor, educador con un par… se llama vocación y se aprende más con uno de estos que con cien escuchadores de sí mismos.
Pedro: Tienes razón. Primero hay que tener vocación (no todos la tienen). Y no perderla se va haciendo tarea difícil, pero hay que mantenerse firme.
Kokycid: Qué suerte cuando se tienen maestros de los buenos. Qué espanto cuando se sufre a los malos. Me quedo con el recuerdo de los primeros.
Manuel: La vocación es el camino. Y lo vocacional es lo que nos lleva a buscar nuevos caminos para seguir.
faq: Gracias por la advertencia de la errata en el título de la entrada ya está corregida.
Saludos a todos y gracias por vuestros comentarios.
Vaya…
no sabía, no me acordaba, que los comentarios son "on line"
Raúl no publiques esta entrada.
¿está bien puesto el título? "Enseñanaza y afán"
porque he pensado que podía ser un juego de palabras pero no lo he pillado.
Raúl hay que adaptase a los tiempos, renovación es lo que nos falta… innovación lo que se necesite… a los que nos dedicamos a este apasionante mundo de la enseñanza nos falta apoyo y comprensión… con la vocación se nace, pero hay que descubrirla. Trabajar sin vocación es trabajar de camino al fracaso. Saludos
Yo he tenido la gran suerte de tener varios de esos maestros primero, y profes después a lo largo de mis estudios. Y nunca se lo agradeceré lo suficiente.
Al final, tener vocación y no perderla.